El dominio propio es tal vez una de las cosas más difíciles de lograr. ¿Cuántas veces hemos sido derrotados por un mal hábito, una pésima actitud o una perspectiva equivocada? Hacemos promesas de mejorar. Le pedimos a alguien que nos ayude, rindiéndole cuentas. Pero, en el fondo, sabemos que no tenemos la voluntad ni la capacidad de cambiar. Podemos hablar, hacer planes, leer libros de autoayuda, ¡pero nos resulta difícil vencer y controlar muchas de las cosas de nuestro interior!
A Joop Zoetemelk se lo conoce como el ciclista más exitoso de Holanda, y esto se debe a que nunca se rindió. Comenzó y terminó el Tour de France 16 veces, antes de ganarlo en 1980. ¡Eso sí que es perseverar! Muchos han logrado triunfar tras subir una escalera especial llamada «no rendirse nunca». Sin embargo, otros han perdido la oportunidad de alcanzar el éxito porque abandonaron demasiado rápido. Esto puede suceder en todas las áreas de la vida: familia, educación, amigos, trabajo, servicio. La clave para la victoria es la perseverancia.